Tiburón blanco, o tiburón devorador. Es el tiburón más peligroso para los seres humanos. Su longitud suele ser superior a cuatro metros, y la fuerza de la mandíbula en conjunto con dientes afilados hace su mordedura fatal para la mayoría de las víctimas. Irónicamente está en peligro de extinción con solo 3.500 especímenes en el mundo.